sábado, 19 de enero de 2013

Desde el suelo

Estoy de buen humor. Sí. Es curioso, porque me acabo de caer tres veces en veinte metros. Me dí contra un cartel. Al menos cinco personas se rieron de mí. Y gasté mucha plata en algo que capaz que nunca termino de dominar. Me refiero a patines. Pero sí. Me reí muchísimo. 

Algún día puede que los controle. Hoy no. Hoy me caí apenas agarré mínima velocidad en la bajadita del garage. Frené colisionando. Y además hice muchos aspavientos. Deben haber sido tres minutos de patinaje y quedé como si hubieran sido veinte kilómetros. 

¿Fracasé? Obvio que no. Es muy temprano para abandonar. Y la vida te tira al piso, a veces literalmente, porque te hace falta. Tenés que esforzarte más. Tenés que rasparte los nudillos. Tenés que estrellarte en la bajada. Sobre todo, tenés que ponerte los rollers en un terreno plano, imbécil. 

Caerse es parte del proceso. Reírse es parte del éxito. Mañana pruebo otra vez. Y así con todo. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario