sábado, 29 de enero de 2011

el discurso del rey

no quería quedarme en casa y ver otra serie en megavídeo (con su media hora de espera cada 72 minutos, pero aún así, fabulosamente gratis). tenía ganas de ir al cine, pero por el cine, no por el hecho de ir hasta ahí (soooo cooooold), así que me busqué el cine más cercano (cine lido) y fui a ver el discurso del rey, que me la habían recomendado por varios lados. acá no hay sinopsis así que llegué cuando ya estaba en marcha la primera escena.

no sabía exactamente qué había ido a ver (me imaginaba algo de intríngulis políticas), sólo una pista en una página web me dio a entender que había algo de pedagogía en la peli. algo de un foniatra con métodos poco ortodoxos. i'm a sucker for movies about learning. por ejemplo, todas las de maestros que al final consiguen hacer cambiar a los alumnos. o las de entrenadores de equipos deportivos. se me vienen a la mente la de cantar de whoopi goldberg, la sociedad de los poetas muertos, finding forrester o to sir with love. esas películas de pequeñas epopeyas personales que hacen llorar. y el discurso del rey es una de esas películas.

está basada en una historia real. más bien, está basada en LA historia. en la historia de inglaterra y sus reyes, y en particular, las circunstancias de cómo llegó jorge vi al trono. y sus problemas de tartamudeo. además de mostrar con ingenio y simpleza algo de cómo es la vida de un rey (según qué rey), también está eso de que nos identificamos con el tema. a cualquiera le asusta hablar en público. en época de presentaciones publicitarias donde me tiembla la voz cuando tengo que explicar el arte de la campaña, esta película me gustó todavía más por eso mismo, y por el tipo de trucos que logue le enseña a bertie para poder solucionar su problema. y además, hay una estética muy cuidada en toda la película, con una composición de los planos súper fotográfica y perfecta. y no puede faltar un discurso motivador en estas películas de aprendizaje, y ese discurso real de cuando inglaterra entró en guerra con alemania me hizo llorar. sobre todo, saber lo que había atrás de ese conjunto de palabras emitidas por radio. una pequeña sala, un montón de palabrotas, música, una ventana y la amistad entre dos hombres.

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