jueves, 10 de junio de 2010

niños

hoy fui a sacar fotos de una charla para padres y madres titulada "tengo hijos, y ahora, ¿qué hago?" dada por una psicóloga.

fui con dos ideas en la cabeza: que no iba a haber casi nadie y que las que fueran iban a ser sólo madres muy desesperadas.

volví con ambas ideas destruidas y algunas reflexiones extra.


en primer lugar, el salón estaba lleno. había hasta gente que no tenía dónde sentarse. esto me asustó, porque quiere decir que tener un hijo hoy en día es algo terriblemente complicado, y hay mucha gente ansiosa por oír consejos.

en segundo término, había muchos padres. o sea, padres solos y padres con las madres de los niños -y los niños, que tenían un lugar aparte para irse a jugar-. esto me alegró mucho. por lo menos para mí, significa que la típica noción machista de que la madre tiene que criar a los hijos está cambiando, y radicalmente. significa que hay cuatro manos para repartirse (y compartir) la tarea esa terriblemente complicada que es criar a los hijos.


y las reflexiones extra que me traje, son extremadamente personales, y en cierta forma espero que no las compartan.

me da un miedo atroz ser madre porque me da un miedo atroz ser una mala madre.

alguien (y me refiero a un hombre con mucho carácter que además tenga la enorme paciencia para tolerarme en el día a día) va a tener que convencerme de que tener hijos está bueno. y no sólo con el proceso de búsqueda de la creación de un ser humano, porque eso es lo más fácil de todo, sino con todas las responsabilidades que vienen después. o sea, va a tener que tener pinta de ser muy buen padre para lograrlo.

los niños son terribles. los chiquitos que no se pueden ni agarrar son demasiado frágiles y no paran de llorar. los más grandecitos, tipo de 2 años hasta 7, son cute pero demoníacos, indominables. y con los de 7 para arriba, hasta 11, me cuesta tener empatía y captarles la atención, y ya están para todas las pavadas de la televisión y hannah montana y eso. y después de esa edad son pre adolescentes y muy adolescentes y completamente intratables, además de bobitos. obvio que hay excepciones (algunos primos) pero mi aversión a los infantes en general se plantea en estos términos.

por lo pronto, y por pronto me refiero a unos 8 o 10 años, no voy a tener hijos a no ser que ocurra alguna eventualidad inesperada...

y si algún día los tengo, pobrecitos! los compadezco de veras.


No hay comentarios:

Publicar un comentario